Las bibliotecas virtuales son mi descubrimiento de 2020, pero las editoriales no lo ponen fácil
Con estos temas de mi columna quincenal va a parecer que me paso el día leyendo, pero qué va. Hace poco hablaba de por qué leo tanto en el móvil , y ahora quiero ampliar una idea que mencioné brevemente en aquel texto: la de un descubrimiento llamado bibliotecas virtuales . Utilizaba tímidamente una desde hace años, pero en estos últimos tiempos me he convertido en usuario cada vez más convencido de su valor y lo bien que estas plataformas se han adaptado a los nuevos tiempos. Y eso a pesar de quienes publican los libros, muchos de los cuales no ven con buenos ojos que se presten gratuitamente y no acabemos comprándolos. Si quieres, (casi) no tendrás que pagar por un libro en tu vida Ni recuerdo cómo descubrí eBook Pozuelo , pero lo cierto es que cuando me apunté a la biblioteca física de esta localidad ya tenía bastante claro que (al menos la parte física) la iba a usar poco . Era más una excusa para que mis niños cogieran un libro de vez en cuando y nos diéramos un paseo hasta a