Llevo una semana con un Apple Watch Series 9 viniendo de un Series 4. El cambio me ha sorprendido más de lo que esperaba
Sigo ponderando la posible compra de un iPhone 15 Pro (en un principio no iba a hacerlo pero tengo motivos para replantearlo), pero una compra que hice el propio día del lanzamiento de novedades fue un nuevo Apple Watch. La decisión era firma, y reforzada por el bajón de rendimiento que tuve con mi antiguo reloj una vez lo actualicé a watchOS 10 . Y es que sí, mi Apple Watch Series 4 ya cumplía cinco años y le tocaba una jubilación . Así que sin reservas, a la brava, acudí a una Apple Store el pasado viernes y conseguí un flamante nuevo Apple Watch Series 9 . ¿El resultado? Muy positivo. Saltar una o dos generaciones no vale la pena. Saltar cinco, sí No tomé la decisión de cambiar por las nuevas funcionalidades de los Aple Watch Series 9: sencillamente iba a comprarme el nuevo modelo tuviese lo que tuviese porque era una necesidad . Mi Series 4 ya no aguantaba más. Así que sabiendo que el Apple Watch Ultra 2 era demasiado reloj para mí, fui de cabeza a por ese Series 9.