Estamos en 2025 y millones de hombres en todo el mundo se siguen negando a una cosa: los pantalones cortos
En un par de meses tengo una boda. Y aunque aún no sé qué me pondré exactamente (traje, no traje), algo sí tengo claro: no iré en pantalones cortos. Tampoco los sacaré del armario para mi próxima reunión de trabajo, ni para la comida con antiguos compañeros de la escuela, ni seguramente para mi próxima cena familiar, igual que no lo hice ninguno de los 11 años que trabajé en una oficina. Bien visto, en mi día a día hay pocos momentos para los pantalones cortos, ya no digamos las bermudas. Y el mío no es un caso único. La relación entre los shorts y los hombres no es sencilla y (casi) a las puertas del verano quizás sea un buen momento para hacerse la gran pregunta: ¿Por qué? "Solo para el tenis o la playa" . Hace unos años el reportero Jefferson Hack, de la revista AnOther , le pidió al diseñador y cineasta Tom Ford que le diera algunas lecciones sencillas para ser "un caballero moderno". Él cito cinco y una la reservó específicamente para hablar de la prenda ...