Starlink está ahora mucho más cerca de conseguir su objetivo: señal directa para smartphones en todo el mundo
SpaceX cerró hace unos días la mayor compra de su historia. No tiene que ver con cohetes, ni con naves espaciales, pero allana el camino para que Starlink no deje ningún rincón de la Tierra sin cobertura. Un poco de contexto. El pasado 8 de septiembre, SpaceX anunció un acuerdo que volvió a sacudir los cimientos de la industria satelital: la compra de todo el espectro de la banda S de EchoStar en Estados Unidos y sus licencias globales de servicio móvil por satélite. La operación, valorada en 17.000 millones de dólares, es astronómica porque no busca un retorno de inversión a corto plazo, sino el dominio estratégico del mercado. En Xataka El espectáculo de drones del Vaticano fue un encargo a un empresario insospechado: el hermano de Elon Musk Con esta jugada, SpaceX adquiere el carril necesario para su servicio Direct to Cell de cobertura celular, pero además elimina de un plumazo a su principal competidor en potencia , que era la propia EchoStar. La compañía de Charlie...