Son tres dispositivos móviles que ofrecen muchos puntos en común pero destacan en un apartado en concreto. Cada versión apuesta por algo en particular, ya sea la duración duración de la batería, la cámara o la pantalla. LG trae a España llamada gama X, que son «especiales». De esta forma, y por un precio reducido, por debajo de los 300 euros, los usuarios pueden tener un potente terminal de gama media, pero, por ejemplo, con la cámara de un tope de gama, o con un exclusivo sistema de doble pantalla. Se trata de tres modelos diferentes (se espera que haya más en el futuro), el X Cam el X Screen y el X Power. Los tres dispuestos a hacerse un sitio en el complicado mercado de la gama media. Pero veamos. El LG X Cam cuenta con una pantalla de 5.2 pulgadas y una resolución Full HD (1.080 p). Y lleva instalado el mismo sistema de doble cámara que su hermano mayor, el LG G5, aunque con una resolución algo menor. Es decir, dos cámaras traseras, de 13 y 5 megapixeles (el G5 las tiene de 16 y 8 megapixeles) y una delantera de 8 megapixeles (igual a la del G5). El segundo terminal, el LG X Screen, es algo más económico que el X cam. Y su característica diferencial ya no es la cámara, sino la pantalla. El terminal, en efecto, incorpora, al estilo del LG V10 (otro de los tope de gama de la compañía), una segunda pantalla «always on» (de 1.76 pulgadas), justo encima de la pantalla principal, que es de 4.93 pulgadas. Las dos pantallas funcionan de forma independiente y no es necesario encender las dos cuando trabajamos solo en una de ellas. La resolución es de 1.280 x 720 pixeles. La característica llamativa del X Power es su gran batería de 4.100 miliamperios que garantiza, según la firma surcoreana, dos días completos de uso intensivo. Y lo mejor es que solo necesitaremos dos horas de cargador para una recarga completa. El terminal también puede funcionar como si fuera una batería portátil.
Fuente: ABC Tecnología
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