La NASA quiere proteger a la Tierra de posibles impactos de asteroides y por primera vez intentarán desviar uno en 2022

El que un asteroide se dirija a nuestro planeta y provoque caos y destrucción es algo probable, sin embargo, hoy día no contamos con métodos que puedan evitar o al menos traten de reducir este posible impacto. La NASA lo sabe y aseguran que ya trabajan en ello.

La idea no es nueva, surgió en 2015 bajo el nombre de proyecto DART (Double Asteroid Redirection Test), donde también colabora la ESA, y se basa a grandes rasgos en enviar a una nave a impactarse contra un asteroide para desviarlo de su curso. Ahora la NASA está confirmando que han recibido autorización para echar a andar la misión, y la fecha marcada en el calendario es octubre de 2022.

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El objetivo: el asteroide (65803) Didymos

Tras algunas actualizaciones e investigación, la NASA, a través de su 'Oficina de Coordinación de la Defensa Planetaria' (PDCO) empezará con los preparativos para enviar la nave DART al asteroide conocido como '(65803) Didymos', cuyas dimensiones son de aproximadamente 150 metros, que forma parte de un sistema de 'doble asteroide' y que ha sido clasificado como "potencialmente peligroso".

La misión consiste en enviar a la nave DART, también conocida como "impactador cinético", cuyo peso es de aproximadamente 500 kilogramos, a impactarse en contra del asteroide a una velocidad de 6 km/s. Con esto, en teoría, se cambiaría el rumbo de la órbita del asteroide en 0,4 milímetros, una desviación que sería suficiente para cambiarle el rumbo e incluso sacarlo de su órbita.

Andy Cheng, del Laboratorio de Física Aplicada Johns Hopkins, mencionó:

"DART es un paso crítico para demostrar que podemos proteger a nuestro planeta ante un futuro impacto de asteroides. Dado que no sabemos mucho sobre su estructura o composición interna, debemos realizar este experimento en un asteroide real. Con DART, podemos mostrar cómo proteger a la Tierra de un ataque de asteroides con un impactador cinético que golpearía el objeto peligroso para que cambiara a una trayectoria que no amenace al planeta."

Dentro de este proyecto también está participando la ESA, quien se encargará de enviar a la nave 'Hera', la cual se encargaría de recopilar datos sobre el asteroide. Hera estará acompañada de un par de nanosatélites que medirán datos como el campo gravitacional y la estructura interna del asteroide para futuras investigaciones.

La misión de la ESA está programada para el mes de diciembre de 2020, mientras que la de la NASA apunta a octubre de 2022.